Pasa la bomba

Este es el que, entre los juegos de beber, debería jugar primero. ¿Por qué? Porque eso es lo que requiere un mínimo de concentración y conocimientos lingüísticos. Si lo mantienes como último pasatiempo de la tarde, corres el riesgo de no llegar en las condiciones adecuadas para jugar.

Para este juego necesitarás tarjetas en las que estén escritas dos o tres letras. Todos los jugadores tendrán que pensar en una palabra con esas letras en un tiempo determinado.

Lanzando un dado o una moneda, se decide por sorteo si las letras serán el final o el principio de la palabra. Luego, por turno, todos los jugadores dirán su palabra. Los que no han pensado en ninguno tendrán que beber.