LAS ÁNFORAS

Nada.

Los jugadores se colocan por parejas, cogidos del brazo, creando la forma de un ánfora antigua. Un par de jugadores se dividirán, uno será el guardia y el otro el ladrón. Comenzarán a perseguirse mutuamente hasta que el guardia haya alcanzado y tocado al ladrón, haciendo que los papeles se inviertan, el guardia se convierta en el ladrón y viceversa. El ladrón puede esconderse entre las ánforas. Para ello, debe adherirse a un ánfora, de modo que la otra mitad del ánfora se convierta en un ladrón y tenga que huir. El líder del juego puede organizar el cambio de roles entre el guardia y el ladrón gritando "CAMBIO" (puede ser útil para hacer el juego más dinámico). El juego termina cuando todos han corrido al menos una vez.

Ninguno, juegas por diversión.